¡Otra vez! ¡Una más! ¡Otra avería del metro de Madrid, aquel por el que suspiran según los anuncios el resto del mundo y hasta las más pequeñas poblaciones!
Si este es de los mejores, me da miedo pensar cuales serán los últimos de la lista…
Si este es de los mejores, me da miedo pensar cuales serán los últimos de la lista…
Aclaro mis quejas: puedo reconocer que el metro de mi ciudad llegue a un montón de puntos, que tengas tropecientos kilómetros, pero ¡NO FUNCIONA! El servicio prestado ha sido inversamente proporcional al nuevo kilometraje y al precio de los billetes y abonos mensuales.
Todo lo puedo reducir a que en poco más de seis años, el tiempo que debo pasar al día dentro del suburbano ha subido en casi 15 minutos por trayecto, ¡casi una hora más al día! Quizá así se explica el precio del billete. ¡Nos cobran la estancia! Como se nota que los responsables políticos del transporte madrileño no utilizan el metro ni los autobuses. No negaré tampoco que gracias al nefasto funcionamiento me he aficionado a ir alguna veces a pie, aunque suponga una hora y a desempolvar una actividad olvidada, la bicicleta (la bicicleta y Madrid será tema de algún que otro comentario) y eso algo que mi salud lo agradece.
Madrileños, esto es lo que hay y si no os gusta os jod…o lo que sea.
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